El cine en el siglo XIX: cine en España en 1900

Arturo Truan, cineasta pionero gijonés

Entiendo que a estas alturas no hará falta explicar que el año que hace el milésimo noningentésimo de la era común (aka después de Jesucristo) es el último del siglo decimonoveno, y empezamos a contar el vigésimo siglo con el milésimo noningentésimo primero de los referidos años.

No, no se han equivocado de blog, lo que pasa es que mi deformación profesional es de filología española, y quería aclarar el título del artículo porque ya veo que algún lector (si es que hay alguno) quizá ponga caras de extrañeza. Además, se están perdiendo los ordinales.

Mi artículo sobre las primeras películas rodadas en España que se conservan llegaba hasta el año 1899, y con este otro pretendo completar el siglo XIX con las películas rodadas en España que aún podemos ver.

La primera película conservada (rodada entre el 25-27 de febrero) sería el carnaval en la avenida de Recoletos de Madrid de Antonio García Escobar que ya analizamos en el artículo dedicado al cineasta del rey Alfonso XIII, pero por lo demás, no empieza bien el año 1900 para el cine en este país (como decía Larra).

Apenas conservamos una panorámica de las que llaman “toma fantasma” (poner la cámara cinematográfica en un vehículo, procedimiento que en estos años era éxito asegurado) de la casa Pathé que muestra vistas de San Pol del Mar, y de la que no sabemos mucho más, en toda la primera mitad de este año. Tiene la duración estándar de las películas de aquel tiempo, en torno a un minuto. Sigue el modelo de la película de la misma productora Voyage dans un train, de hacia 1896, de la que Georges Sadoul, el gran historiador del cine, dijo que fue rodada por el mismísimo Charles Pathé:

Del 18 de agosto conservamos dos metros de película que muestra la llegada de los reyes al puerto de Gijón. Una cinta que podría ser atribuida al cineasta asturiano Arturo Truan, aunque no hay seguridad de ello. También están en ese caso un par de películas de desfiles de soldados en Gijón que miden en torno a 10 metros, unos 25 o 30 segundos cada una. Quince metros (unos 45 segundos) dura otra película que muestra la gijonesa calle Corrida que está en el mismo caso que las mencionadas y hubo de ser rodada antes del 5 de octubre. Todas ellas atribuibles a Truan. Así pues, algunos trozos de películas incompletas de la populosa ciudad costera asturiana y una panorámica (hoy lo llamaríamos travelling) desde la parte trasera de un tren es la magra cosecha del cine conservado de ese año. Además son películas muy difíciles de ver. Hasta donde sé no están subidas en la plataforma de la Filmoteca Española ni en la de Cataluña. Tampoco las encuentro en los sitios del Ministerio de Cultura ni en ningún otro lugar de la red.

Ángel García Cardona

Y eso es todo amigos. Salvo la de Escobar, el año 1900 no ha dejado películas importantes. Y es una lástima, porque de ese año varias películas hoy perdidas podrían ser muy interesantes, como las que rodó el cineasta Ángel García Cardona en Valencia ese año, que son bastantes (véase la sección 3 de su ficha en el GRIMH en el enlace). Un tal Cepeda (del que no sabemos casi nada más) rodó en enero el muelle de Cádiz a la llegada del tren mixto de Madrid. Félix María Gómez Almansa grabó el mismo mes una salida de los obreros del astillero, unas fiestas del Corpus y el 29 de abril la botadura del crucero Extremadura, también en Cádiz. El pacense Fernando Garrorena registró un baile de máscaras en el casino de Badajoz entre el 25 y el 27 de febrero y una salida de misa de una iglesia de su ciudad el 12 de abril. Hubo una película donde aparecían las figuras del toreo Machaquito y Lagartijo. También una riña de barqueros en un chalet de Cartagena rodada en los primeros meses de este año. La condesa de La Baume Pluvinel rodó el eclipse de sol del 28 de mayo en Elche. Desgraciadamente ninguna de las referidas ha llegado hasta nuestros días. Téngase en cuenta que aproximadamente el 70% del cine mudo se ha perdido. Muchas veces es más fácil encontrar un libro del siglo XVI que una película de la etapa silente de hace más o menos un siglo.

Esta es la magra cosecha que nos depara el cine hecho en España el último año del siglo XIX. Sin embargo podemos llegar a la conclusión de que este 1900 fue el del despegue del cine hecho por cinematografistas españoles: Antonio García Escobar en Madrid, Arturo Truan en Gijón, Ángel García Cardona en Valencia, Félix María Gómez Almansa en Cádiz o Fernando Garrorena en Badajoz se sumaron a lo que el año anterior habían hecho el propio Truan, Gelabert en Barcelona y los Gimeno en Zaragoza por poner unos pocos ejemplos. Todo ello muestra que muchos españoles comenzaron a realizar películas en este periodo, cuando en años anteriores casi todo lo que se veía en las barracas de feria y otros salones, salas de espectáculos y teatros acondicionados para la proyección de cine, procedía de cineastas franceses y, en menor medida, ingleses o estadounidenses.

Fuentes:

- Jean-Claude Seguin Vergara et al., El cinematógrafo en España (1896-1906), Filmoteca Española (Ministerio de Cultura), Madrid, 2024.

- GRIMH (Grupo de Reflexión sobre la Imagen del Mundo Hispánico).